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  • 5 consejos para organizar tus vacaciones de verano

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    Me encuentro metida de lleno en la organización de mis próximas vacaciones de verano. En nuestro caso en particular hay ciertas circunstancias que condicionan la salida ya que, como he comentado en otras oportunidades, cuando viajas con tus hijos adolescentes debes negociar todo: desde la fecha, al lugar, pasando por el estilo y hasta el uso del tiempo libre.

    No es la primera vez, sin embargo, en cada oportunidad aprendo algo de este proceso de organización que puede ser un rompedero de cabeza cuando tienes que coordinar muchas personas, intereses, agendas y presupuesto.

    Aquí van mis 5 consejos para organizar tus vacaciones de verano.

    1) Presupuesto

    Salvo que tengas un bolsillo muy amplio, el presupuesto del que dispongas limitará las posibilidades. Pero sólo eso: limitar. No quiere decir que con poco dinero no se pueda disfrutar, ni descubrir rincones nuevos, ni realizar un gran viaje.

    Siendo muy responsable, puedes definir el importe que puedes llegar a gastar en todo el viaje. Ten en cuenta tanto los servicios que requieren un gasto previo a la salida (reserva de transporte, alojamiento, excursiones), como los gastos en destino (comidas, salidas, transporte local, entradas, actividades, etc.)

    2) Destino

    Una vez definido el punto 1) podrás pintar el mapa de tus posibilidades. Aquí hay que ser muy creativo ya que algunos destinos tienen mas de una opción para vivirlos, y algunas puede que entren en tu presupuesto. Digamos, por ejemplo, que quieres ir a Canarias y se te va un gasto elevado en billetes de avión. Pues para no resignar el destino deseado puedes optar por elegir un alquiler de casas, couchsurfing o un camping para bajar el costo del alojamiento.

    Por otro lado, y dentro de la negociación siempre presente cuando viajas con adolescentes, la definición del dónde estará marcada por sus intereses, por la asistencia a un concierto, por un encuentro con sus amigos, o por cualquier otro interés de tus hijos.

    Tú puedes desear tirarte en una playa de Menorca sin mover un dedo durante tus vacaciones, pero es probable que termines caminando por las calles cool de Londres o París siguiendo los pasos de tus hijos. ¡Y así debe ser! Que el tiempo pasa muy rápido y nunca sabrás cuál es el último viaje “en familia” con tus ya-no-peques.

    Playas del Caribe (a pesar de las nubes)

    Playas del Caribe (a pesar de las nubes)

    3) Servicios

    Ya lo comentamos recién, un destino puede conocerse de muchas maneras, y alguna puede que quepa en tu presupuesto. Para ello, habrá que sacar cuentas y sentarse a husmear entre todas las opciones de servicios turísticos que tenemos a nuestra disposición. Trenes, buses, ferries, aviones, o en coche. Armaremos una ruta aproximada de los puntos que queremos tocar, o de los lugares a visitar si vamos hacia una ciudad.

    A partir de allí, y teniendo en cuenta los intereses de todos los integrantes del grupo, podremos ver qué tipo de servicios requerimos.

    Hago aquí un aparte para sugerir que no nos olvidemos de uno imprescindible. Viajes solo o acompañado, cerca o lejos, siempre ten en cuenta la seguridad y la salud. Para ello, revisa la cobertura de tu seguro de salud local, o consulta si tu tarjeta de crédito incluye cobertura de este tipo en el destino escogido. O contrata uno. No es un gasto, es una inversión en tranquilidad y asistencia. Y ojalá que no tengas que comprobarlo.

    Después quedará la decisión personal de tomar excursiones organizadas o ir a tu aire. Hay para todos los gustos y necesidades. Quienes no se atreven mucho solos por el mundo, agradecerán tener las cosas mas o menos organizadas, y quienes deseen la mayor libertad del mundo.

    Reconozco que tengo un poco de ambos (y creo que somos unos cuantos). En ocasiones cuando viajo a un destino absolutamente desconocido, agradezco un traslado a la llegada, o una visita de la ciudad guiada para poder ubicarme, aunque el resto del tiempo la camine por mi cuenta.

    Algo similar ocurre con los hoteles. Me siento mas segura cuando los llevo contratados desde casa, e incluso puedo aprovechar el tiempo para elegir con paciencia lo que mejor va con mis gustos y los de mi familia, y hasta servirme de las ofertas por reserva anticipada o las promociones que puedan incluir algún servicio extra por reservar con antelación (el desayuno gratis, o el parking o el acceso al spa).

    4) Equipaje y en viaje

    Aquí el tema es muy sencillo. Ya no tienes que cargar con el equipaje de tus niños pequeños. Son adolescentes y ellos saben muy bien lo que quieren vestir… pues se hacen su propia maleta y se ocupan de llevarla. Así también asumen la responsabilidad de buscarse la vida si se olvidan algo en casa. ¿Llevan sólo dos camisetas para 10 días? No te preocupes, ya habrá solución.

    Olvídate de hacerte responsable de esas pequeñas cosas. Ellos “son grandes”. Y la verdad, es que poco importa si se dejaron las chanclas de la playa en casa. Por otro lado, disfrutarás de la libertad de movimientos ya que, en mi caso, sólo llevamos una maleta pequeña (de cabina) por persona para viajar en verano.

    Y en cuanto al tiempo en viaje, tenemos un estilo muy simple: nada de superficialidades. Vestimos cómodas y frescas, repetimos vestuario, lavamos sobre la marcha, si nos tentamos igual nos compramos alguna cosita, pero no nos cargamos de regalos, ni souvenirs. Cada una de nosotras tiene un límite: lo que entre en SU maleta pequeña.

    5) Desconexión

    Este tal vez sea el mejor consejo. Aprovecha la organización de tus vacaciones de verano para desconectar del día a día. Que no sea un “trabajo” ni te cargue de mas estrés del que ya llevas acumulando. Disfruta la planificación, juega con las posibilidades, diviértete con la familia imaginando itinerarios, aprende de los intereses de cada uno, escúchalos para enriquecer el viaje. Anticipa la experiencia. Vívela aún antes de salir rumbo al aeropuerto.

    Y una vez en destino, sólo disfruta.